...ezta horrela ere
Lo de Madrid y el botellón no deja de sorprenderme. Cada día descubro una nueva norma, que roza la demencia y la paranoia.
Carrillo y Sara se han marchado esta mañana rumbo a Iruñea. Ayer, mientras yo trabajaba (mucho y largo) estuvieron de compras por Madrid. Ya por la tarde-noche, quedamos en un pub inglés que hay debajo de mi casa para echar unas cervezas. La noche era buena y se estaba agusto en la terraza por lo que nos tomamos unas cuantas. Y aquí viene la historia. Sobre las 22.30 nos fuimos hacia casa y , a pesar de que las birras llenan bastante, pensamos en coger algo para cenar. Tras varios días tomando tapas y tostadicas por La Latina, decidimos apostar por la comida sana y fuimos al Telepizza que hay junto a mi casa.
Pedimos una pizza y varias cervezas para llevar (que acabo de volver de vacaciones y mi nevera está vacía). La post-adolescente que nos atendía entonces cambió el geste de la cara. Puso un rostro entre sorpresa y tensión (“dios mío, esta es una de las situaciones para las que nos prepararon en el exigente cursillo de formación de tres minutos!!”pensaba ella). Sin decirnos nada y sin cambiar la expresión, cogió el micrófono: “Juan Luis a caja por favor”. Carrillo y yo nos miramos sorprendidos...a la par que acojonados...no estaría llamando a seguridad no?. Juan Luis era el mandamás del Telepi. Un chaval, con bigotillo y feaco, vestido igual que sus compañeros, pero con una plaquita en la solapa que ponía: ENCARGADO. Le preguntó a la cajera que ocurría y esta, dándonos la espalda y susurrando se lo contó. Juan Luis (encargado del Telepizza de Carabanchel ALTO, vamos una de las personas más importantes del barrio), nos miró serios, como el municipal del otro día y nos explicó, con cierto tono paternal, que la ley anti-botellón les prohibía vender alcohol pasadas las 10 de la noche y añadió (por si nos queríamos hacer los listos) que ni en los chinos encontraríamos. Le dijimos que íbamos directos a casa y que nos las beberíamos allí, a lo que respondió diciendo “y eso a mi quien me lo asegura? Además está prohibido”.
Segundo encontronazo con la autoridad en tres días, primero los municipales de Madrid y después el encargado del telepi de Carabanchel ALTO, y todo por la retorcida e hiper-restrictiva Ley Anti Botellón. Les preguntamos (no se si por hacernos los graciosos o por tocar un poco más los cojones mientras nos dábamos de bruces contra la dura pared de la autoridad que era Juan Luis) a ver si metiéndolas en una bolsa de papel como en Estados Unidos, nos dejarían sacarla. A Juan Luis no le hizo gracia (o no lo entendió) por que no se rió y se mantuvo impasible en su actitud de alerta…que cosa ser encargado del Telepi de Carabanchel ALTO.